Detrás de esta palabreja se esconde uno de los pilares básicos de nuestra sociedad, el consumismo. La obsolescencia programada es la fecha de caducidad que los diferentes fabricantes le ponen a sus productos para después vendernos más.
Es un secreto a voces, muchas veces habremos oído que las "cosas" de antes duraban más, pero parecía más un dicho que una realidad. Después de la crisis del 29, el modelo de negocio cambió, la industrialización causó que las marcas pudieran fabricar a un ritmo superior al de la demanda, lo que causaba despidos de obreros, cierre de fábricas, etc.. por lo que la tendencia era hacer los productos menos duraderos y así necesitaríamos cambiarlos con más rapidez incentivando el consumo en general. Esto, que parece la típica conspiración mundial se demuestra en documentos de todo tipo de productos.
Por poner un ejemplo, en el mundo de las bombillas, se firmaron acuerdos internacionales para estandarizar que la duración de las bombillas no fuera superior a las 1000 horas de uso, incluso con documentos con multas internas por incumplimientos de estas normas, fabricantes de medias de nylon, hicieron estas prendas más frágiles a propósito para aumentar su consumo, y así, un largo etcétera en casi todos los productos que hoy en día consumimos.
A día de hoy la obsolescencia programada tiene además otra manera de actuar, dejar obsoleto el producto sacando a la venta un producto mejorado en ciclos cortos de vida. Apoyados por campañas de marketing, hacen que desees el nuevo producto, más rápido o mejorado en algo. Las dos tipos de estrategia pueden ser rechazadas, pero a mi parecer, acordar construir un producto que se rompa en un tiempo limitado, me parece ilícito.
Al utilizar materiales cada vez de peor calidad unido a la fabricación en cadena, hace que los productos sean más económicos y podamos cambiarlos totalmente cada vez que se estropean, pero este sistema, que hace que todos tengamos trabajo y consumamos por encima de nuestras posibilidades trae un problema añadido muy importante, la sostenibilidad. Los recursos del planeta son finitos y llegará un momento en el que no existan suficientes para todos los habitantes del planeta y ese será el momento en el que la obsolescencia programada quede obsoleta, pero seguramente no nos demos cuenta hasta que estemos en el borde del precipicio.
Podéis saber más en este reportaje de la 2 muy bueno.
A día de hoy la obsolescencia programada tiene además otra manera de actuar, dejar obsoleto el producto sacando a la venta un producto mejorado en ciclos cortos de vida. Apoyados por campañas de marketing, hacen que desees el nuevo producto, más rápido o mejorado en algo. Las dos tipos de estrategia pueden ser rechazadas, pero a mi parecer, acordar construir un producto que se rompa en un tiempo limitado, me parece ilícito.
Al utilizar materiales cada vez de peor calidad unido a la fabricación en cadena, hace que los productos sean más económicos y podamos cambiarlos totalmente cada vez que se estropean, pero este sistema, que hace que todos tengamos trabajo y consumamos por encima de nuestras posibilidades trae un problema añadido muy importante, la sostenibilidad. Los recursos del planeta son finitos y llegará un momento en el que no existan suficientes para todos los habitantes del planeta y ese será el momento en el que la obsolescencia programada quede obsoleta, pero seguramente no nos demos cuenta hasta que estemos en el borde del precipicio.
Podéis saber más en este reportaje de la 2 muy bueno.
Miguel, por favor no publiques estas cosas que nos dejas sin trabajo!!!!!!!!
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