Intel lleva tiempo desarrollando junto con Apple una tecnología que sea capaz de evolucionar la transferencia de datos de nuestros dispositivos, anclados la mayoría en el estándar USB 2.0. Esta nueva tecnología que está a punto de comercializarse de llama "Light Peak" y remplaza la electricidad por conexiones de fibra óptica para llegar a alcanzar velocidades de 10 Gigabits por segundo.
Por otro lado tenemos ya disponibles muchos aparatos con USB 3.0 y retrocompatibilidad con el 2.0, por lo que aunque nuestros equipos no lleven de momento puertos 3.0, serán compatibles adaptados a la velocidad normal. La velocidad de transferencia quedaría en 5 Gigabits por segundo.
En breve veremos una batalla por el nuevo estándar, que decidirán los fabricantes que se animen a montar una tecnología u otra y el precio de los periféricos.
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